La junta directiva de la Asociación Difusión Felina de Pontevedra ha decidido clausurar temporalmente las entradas de nuevos gatos en el colectivo durante, al menos, quince días, debido a la aparición de un virus que está afectando a algunos de estos animales de compañía que se encontraban acogidos en viviendas de miembros del colectivo.
En los últimos días han fallecido tres gatos, dos que se encontraban de acogida, y otro propiedad de uno de los integrantes de la asociación. Según explican los representantes de este colectivo se trata de una cepa de calicivirus y panleucopenia, un brote que resulta letal en gatos jóvenes y que no hayan sido vacunados.
Por este motivo, al menos durante los próximos quince días no recogerán más animales, a la espera de que las viviendas de acogida sean desinfectadas. Según indica Carlos Ferrer, presidente de Difusión Felina, acoger un gato nuevo sería condenarlo a una muerte segura.
La asociación hace un llamamiento para encontrar nuevas casas de acogida en las que no haya otros gatos y, de esta forma, poder mantener en cuarentena a los gatos que puedan ser portadores de este virus que no es contagioso ni para perros ni para las personas, solo se transmite entre gatos.
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