La protectora de animales de Cambados ha querido hacer, una vez más, una llamada de atención dirigida no solo a los responsables de las administraciones públicas, sino también al conjunto de la sociedad, ante un problema que consideran alarmante.
Hace ya un tiempo que comenzaron a alzar la voz pidiendo soluciones ante el sobrecargo de animales que tiene el refugio, pero con el paso del tiempo su situación se ha vuelto insostenible. Si en sus instalaciones cuentan con un aforo limitado que ha sido sobrepasado con creces y las casas de acogida están totalmente cubiertas, sus trabajadores y voluntarios se ven desbordados ante los numerosos casos de abandono que día a día les llegan no solo desde Cambados, sino también desde otros municipios salinenses. Más allá de esto, la protectora recibe llamadas de lugares externos a la comarca como Cuntis, Tui, Poio, Caldas o Lalín.
Su presidenta, Olga Costa, ha querido reiterar una vez más la importancia de crear otras protectoras alternativas, pues entre Cambados y Vilagarcía no pueden hacerse cargo de todos los animales maltratados o abandonados que, en muchos casos, llegan a sus manos más muertos que vivos.
Los animales son sujetos de derecho al igual que lo son los seres humanos, así lo recoge la Declaración Universal de los Derechos de los Animales proclamada en 1978 y aprobada por la UNESCO y la ONU. Por este motivo, Costa explica que es necesario llegar a un acuerdo para que todos los animales de los que no pueden hacerse cargo tengan algún otro lugar al que acudir, ya que todos ellos necesitan cuidados y atenciones y la protectora de Cambados se ha visto en la obligación de atender solo a los casos más extremos. Tras recoger ayer a nueve perros y cinco gatos en un estado lamentable y plagados de pulgas, tuvieron que rechazar a tres perros, con el gran cargo de conciencia que eso implica.
Los perros acogidos han de ser desparasitados, alimentados, bañados y medicados u operados en caso de ser necesario. Todo esto cuesta un dinero que la protectora no tiene, a pesar de que el Concello de Cambados cumple con su parte. El problema es que aunque la zona de Cambados está bien cubierta, los medios de este refugio no llegan para hacerse cargo de los animales que vienen de otros puntos de la comunidad. Del mismo modo, sus infraestructuras tampoco están adaptadas para el alto número de ocupantes, que tienen que ser puestos en jaulas individuales al terminar el día para que no se produzcan trifulcas entre ellos en ausencia de sus cuidadores, que no abarcan con tanta responsabilidad.
El alcalde de Cambados, Luis Aragunde, apoyó a la protectora mostrando ante el presidente de la mancomunidad, Gonzalo Durán, la necesidad de poner en funcionamiento el albergue que se construyó para este fin pero que actualmente está parado. Asimismo, Costa prevé reunirse esta semana con Durán para tratar este y otros temas, como políticas de concienciación a la sociedad en contra del maltrato y abandono animal.
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