Poco queda ya de la boxer recogida medio moribunda en una cuneta al lado del cadaver de un gato y con una argolla en el cuello. Los ojos llenos de pus van curándose muy bien y ya no se ven tanto esas costillas. Las señales de haberla golpeado se ven menos y ella ha dejado atrás sus miedos poco a poco. Lola en su casa de acogida disfruta de una vida tranquila, pasea, se lleva bien con otros perros y con la gente. Es muy inteligente y agradecida. Esta nota es para agradecer la labor increible que está haciendo la casa de acogida y para que no olvidemos que Lola continua su evolución favorablemente pero sigue necesitando un hogar definitivo.
Contacto : coordinadorapp@gmail.com
La casa de acogida ha echo de Chata una perra nueva. Ojalá hubiera tantas Milas en este mundo como perros necesitados
ResponderEliminar