La plaga de pulgas existente en el CEIP Barcelos estos días, causada por la continua presencia de gatos, ha motivado al Concello a plantearse nuevas medidas que eviten que se repitan casos como este.
El director del centro, Ángel Rodríguez, aseguró ayer que la base del problema «es la gente que continúa dando de comer a los gatos por la noche. Mientras les den comida, los gatos están en la gloria y el problema no va a desaparecer».
Presuntamente, es una señora mayor de la ciudad la que cada noche da de comer a los gatos que se resguardan en el transformador situado en el exterior del colegio.
El concelleiro de Educación, Agustín Fernández, ya se ha puesto en contacto con el jefe de la Policía Local, Daniel Macenlle, para intentar que esta mujer deje de alimentar a los numerosos gatos que hay en la zona.
El concejal del área, Miguel Filgueira, está concienciado del problema de gatos callejeros que están presentes en la ciudad, pero también afirmó que, de momento, «estamos trabajando a medio plazo para actualizar la normativa que abarca los perros, su esterilización, la colocación del chip y los abandonos. Cuando esté terminada, haremos una que regule el caso de los gatos, su alimentación nocturna y el hecho de cuidarlos como si de unos animales domésticos se tratara», comentó.
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