Así es como llegó SKIPY al refugio en agosto del 2008, siendo un cachorrito de unos 4-5 meses, con sus orejotas al viento y el vientre inflado de parásitos. Parecía triste en la foto pero durante su primer mes en el refugio sin embargo SKIPY fue un cariñoso y muy alegre saltarín que buscaba el juego y el contacto continuo. Poco después algo cambió, algo pasó en su canil que lo hizo volverse tímido, miedoso y reservado, y su tiempo de feliz cachorro se acabó mucho antes de dejar de serlo.
Fue recogido en una finca junto a Saskia (desaparecida), su presumible madre, Misty (desaparecida), su hermana de camada, Zorba (fallecido), seguramente hijo de Saskia de una camada anterior y Axel, que sigue también con nosotros, posiblemente hermano de Zorba por la edad. En la finca eran alimentados de vez en cuando por un vecino pero asombrosamente « nunca fueron de nadie ».
Según fue pasando el tiempo el pequeño diamente en bruto se fue puliendo, sus preciosas orejotas refinando, y sus rechoncheces estilizando hasta convertirse en un inigualable y bello lobito dorado, en nuestro particular can de palleiro. Pero según crecía SKIPY también más se encogía, y rara vez se le puede ver de cuerpo entero, en realidad rara vez alguien de verdad lo ve.
Por desgracia pocas veces se muestra SKIPY en todo su esplendor, casi siempre y casi todo el día viendo la vida pasar con su cuerpo bien resguardado al cobijo de una caseta, mejor en un lugar alto, y mejor en la caseta más pequeña, como concha de caracol, porque el recelo de aquel día siendo cachorro en el que todo cambió todavía no ha consiguido apearlo.
Y bien metida en su concha de caracol una cantidad enorme de bondad y de dulzura a la que nunca hemos visto tener un momento realmente feliz.
Seguimos esperando el día en que de nuevo todo vuelva a cambiar para SKIPY.
APADRINADO POR ÓSCAR OCAMPO
Contacto: 659147487 (Mañanas) – 600356891 (Tardes)
ponteareasanimal@hotmail.com
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